Los límites de la directividad

En el panorama actual de la tecnología de audio, los altavoces convencionales presentan una serie de limitaciones significativas relacionadas con la directividad del sonido que comprometen la experiencia auditiva ideal.

La calidad del sonido con los altavoces tradicionales puede variar considerablemente en función de la ubicación del oyente, lo que se traduce en una experiencia desigual, especialmente para quienes se encuentran lejos de la fuente de sonido directa.

Multiplicar las fuentes de sonido

Estas limitaciones incluyen la necesidad de añadir múltiples fuentes de sonido y subwoofers para lograr una cobertura completa y una reproducción precisa de las frecuencias, lo que conlleva un aumento de los costes y de la complejidad de la instalación.

Acústica, consumo de energía y salud

Estas limitaciones se traducen en zonas de escucha restringidas, marcadas disparidades sonoras, problemas acústicos debidos a la reverberación y los ecos en paredes y acristalamientos, un elevado consumo de energía y, sobre todo, un impacto negativo en la salud auditiva a volúmenes elevados.

Superar las limitaciones de los sistemas tradicionales de difusión acústica

Estos grandes problemas ponen de manifiesto la imperiosa necesidad de innovar en la forma de diseñar y utilizar los sistemas de audio.

Ante estos retos, hemos desarrollado el Magic Speaker, no como una respuesta, sino como una revolución que barre las debilidades inherentes de los altavoces tradicionales.

Inspirado en principios físicos elementales y en analogías extraídas de la naturaleza y la tecnología, el Magic Speaker reinventa la difusión del sonido para una nueva era del audio doméstico y profesional.

Sonido consistente en 360

Como un guijarro que crea ondas en el agua, el Magic Speaker difunde el sonido de forma omnidireccional, garantizando una cobertura sonora completa y equilibrada en todos los espacios, eliminando las zonas de escucha restringidas y las desigualdades sonoras.

El resultado: un sonido perfectamente disperso y preciso, sin reverberación de las superficies, sin cacofonía y sin realimentación.

Ahorro de energía

Conscientes de la necesidad de ahorrar energía, nos inspiramos en la bomba de calor (PAC) por su capacidad de optimizar el consumo eléctrico de forma sorprendente, desprendiendo más calor del que consume en electricidad.

Optimizar la intensidad sonora sin consumir energía, El Magic Speaker reproduce la dinámica de un látigo, donde un movimiento mínimo en la base se traduce en potencia explosiva en la punta.

La energía cinética que se propaga desde la base hasta la punta del látigo se amplifica, produciendo un potente chasquido, el bang supersónico, con un mínimo esfuerzo inicial.

Amplificación del sonido

Así es como el Magic Speaker transforma la modesta energía sonora en un ambiente acústico envolvente, con una eficiencia energética sin igual hasta la fecha.

El Magic Speaker canaliza y amplifica la energía sonora, gracias a una lámina acústica vibrante, ofreciendo un sonido envolvente y potente, que integra todas las frecuencias de audio, a partir de una cantidad reducida de energía eléctrica.

Esta optimización mejora el alcance y la calidad del sonido proyectado, convirtiendo la energía sonora moderadamente intensa en una experiencia auditiva envolvente y homogénea.

Magic Speaker ofrece un escenario sonoro más intenso y extendido, al tiempo que preserva la claridad y riqueza de los sonidos, así como la inteligibilidad del habla, ya sea en los agudos o en los superpotentes graves.

Proteja su audición

La OMS está dando la voz de alarma: la exposición a altos decibelios pone en riesgo de sordera a más de mil millones de personas, con dramáticas consecuencias sociales y psicológicas.

El Magic Speaker no sólo elimina las deficiencias acústicas tradicionales, sino que redefine la noción de seguridad auditiva.

Al canalizar el sonido como las olas del mar -suave pero potente-, ofrece una protección auditiva vital contra los peligros de los altos niveles de ruido, haciéndose eco de estas preocupaciones.